El Globo sumó su tercera derrota en cinco presentaciones y el clima está que arde. Jugadores insultados, técnico caminando en la cuerda floja, gente enojada y, por si fuera poco, a causa de la victoria de Gimnasia de Jujuy en el día de hoy, Huracán cayó en zona de descenso directo. En Junín, el equipo jugó peor que nunca. Veamos qué tan pobre fue la actuación de los quemeros, que hasta ahora venían con un promedio del puntaje Aguante Huracán de 5,6.
Daniel Islas (6): Posiblemente, el único que zafa. El arquero no tuvo responsabilidad en los goles, de hecho, antes del segundo, logró atajar el penal de Tucker, que luego la metería de rebote. En ciertas jugadas parece que se clava en el área chica cuando debería salir.
Alexis Danelón (2): Hay una palabra para definir exactamente lo que hizo, «nada». El DT lo mandó a jugar de defensor y volante a la vez, pero ni defendió ni atacó. Estuvo perdido, nunca encontró su lugar en el campo y fue reemplazado en el entretiempo.
Walter Ferrero (4.5): Medio punto más por haber convertido el descuento, pero aún así no conformó. Al igual que su hermano, es un jugador fuerte y mete mucho, pero ahí se acaban sus cualidades. Pases erróneos y flojo en el juego aéreo. Convirtió varias faltas.
Leonardo Villán (3): El puesto de líbero le resultó más que difícil. Se mostró desconcentrado en varias jugadas. Muchas veces chocó con Domínguez, que se mantuvo a su lado a lo largo de todo el partido.
Eduardo Domínguez (3): Demostró ser solidario al quedarse junto a Villán en el fondo y ayudar al juvenil a defender por el medio, pero sigue en un nivel muy bajo. Ayer sumó varios pases erróneos. Por momentos, parece un jugador sin experiencia.
Nicolás Minici (4): Junto a Villarruel, eran los dos jugadores más regulares del Globo en el torneo. Sin embargo, ayer su actuación tambaleó, al igual que la del volante. Se proyectó en varias oportunidades, ya que Martínez jugó por el medio y no delante suyo como lo venía haciendo, pero no tuvo peso suficiente en ataque como para generar peligro verdadero. Además, sus subidas dejaron un hueco grande en la banda izquierda.
Walter Busse (3): Ante Merlo jugó de doble cinco y lo hizo muy mal. ¿Dónde lo pone el DT al partido siguiente? De doble cinco nuevamente… Mal partido del ex Independiente. No participó en campo rival, no se asoció con su compañero en el círculo central y no pudo contener los avances de Sarmiento por el medio.
Lucas Villarruel (5): Fue su cuarto partido en el torneo y el primero que no se destaca. Si bien fue el que más voluntad mostró, no tuvo el quite y la recuperación que venía teniendo. Nunca se pudieron acoplar con Busse. Como Huracán casi no tuvo la pelota, no logró distribuirla. Se fue expulsado por doble amarilla a falta de quince mintuos.
Gonzalo Martínez (3.5): Le dio tres pelotas paradas a Huracán, una por una falta real y otras dos por tirarse y convencer al árbitro de que pite ante un foul inexistente. Luego, nada más. Jugó libre, de enganche, como todos lo pedíamos, no obstante fue su peor actuación. Tal fue así que fue reemplazado en el entretiempo.
Julián Bottaro (4): En menos de un cuarto de hora jugado contra Merlo generó más peligro que ayer a lo largo de sus casi 70 minutos en cancha. Muy pobre lo que ofreció por la banda derecha, sobre la cual se ubicó. Jamás se unió al otro delantero del equipo.
Jerónimo Barrales (4.5): Otra vez, la voluntad fue su máxima (y única) virtud. Va a buscar la pelota, la pide, trata de aguantarla. Pero no alcanza. Desde el cuerpo técnico de Sarmiento se avivaron rápidamente que Huracán jugaba solo a tirarle pelotazos, por lo que le pusieron una marca más pesada y así su participación se diluyó casi por completo.
Santiago Chacón (4): Su mayor mérito fue ejecutar el único centro correcto de Huracán en todo el partido, que Ferrero mandó a la red. Tuvo actitud para pedir la pelota e intentar iniciar ataques desde el mediocampo e incluso más atrás, pero fue impreciso al momento de tenerla al pie. Fue partícipe de la jugada del penal, aunque la falta fue más que dudosa.
Jonathan Bustos (4): Ganas ante todo, pero no fue suficiente. Cuando le llega la bocha, se manda hacia campo rival como una topadora, pero de forma un tanto torpe. Demostró iniciativa y eso es importante, más todavía en un equipo en el cual muchos se esconden detrás de sus marcas. Si encontrara un socio en el juego, podría funcionar bien. Más aún si tuviera un nueve de área (que no salga del área) a quien tirarle centros.
Nahuel Oviedo (4): Su ingresó no cambió las cosas. Huracán siguió siendo un fantasma en la cancha. Es difícil realizar un análisis de lo hecho por el jugador ya que la pelota practicamente no le llegó. Sin jugadas de relevancia.
Huracán juega sus partidos cada vez peor. Esta vez, hubo cambio de nombres y de esquema pero el nivel del equipo fue el peor de todo el torneo. El puntaje promedio AH de esta fecha es 3.8, el más bajo hasta el momento, superando incluso la paupérrima actuación del pasado sábado ante Merlo. Hay que mejorar en absolutamente todos los aspectos habidos y por haber. El próximo compromiso será en el Ducó, frente a Boca Unidos. Ojalá que termine en alegría quemera.
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