Lamentablemente, la Comisión Directiva cosecha error tras error. Nadur mismo asumió no entender nada de fútbol, pero hay que preguntarse ¿ahora que no está Mariano Juan, quién toma las decisiones deportivas? ¿Quiénes son los que están detrás suyo? ¿Los que nos mantuvieron años en la B y ya hicieron las cosas mal en una oportunidad?
Hay que destacar que no es el momento para que nosotros, los hinchas, pidamos renuncias, es un momento para apoyar lo que hay, si pedimos la renuncia de Nadur, ¿quién se haría cargo de este desastre? ¿Hay alguna alternativa mejor? Lamentablemente, lo aprovecharían oportunistas que están fuera y hasta adentro del club. Y si pedimos la renuncia del «Chocho» Llop (quien llegó apenas hace unas fechas) ¿quién vendría?
Tampoco es la instancia para hacer políticas de ejemplo institucionalmente, como si fuésemos Vélez o Lanús. Nos estamos yendo a la B Metropolitana, hay que priorizar lo deportivo. Trajimos a un tipo como Barrientos como si fuese un ídolo que nos iba a salvar, con un sueldo millonario, y recordemos que en su momento, más allá de la pelea con Babington, se fue por el dinero. Y no lo dejamos jugar a Battaglia, un pibe surgido en el club, para marcar un ejemplo, porque pidió un aumento que ni siquiera llega a ser la mitad del sueldo de Barrientos.
Barrientos es uno de los jugadores de menor rendimiento y Battaglia uno de los mejores que tiene el plantel, si no se toma la decisión de renovarle (para mi erradamente), por lo menos que lo dejen jugar y explotémoslo deportivamente el tiempo que le queda. De manera contraria, nos quedaríamos sin el pan y sin la torta. Si quieren marcar el ejemplo cuelguen a Barrientos y pídanle que si tiene orgullo renuncie a su sueldo.
Menos es la ocasión de bancar jugadores como Domínguez solo porque vinieron para «ayudar a Huracán». Si vino para eso no hubiera llegado por la suma de dinero que está cobrando, y tendría agallas para reconocer que le hace mal al equipo y salir por unas fechas aunque sea.
Menos es momento para figurar como quieren hacer muchos integrantes de medios partidarios vergonzosos, como hoy el señor Pascual Denegri, que se bajó los pantalones literalmente en la conferencia de prensa y le enseñó el trasero a Llop. O como otros que lo único que hacen es criticar de manera no constructiva, cuando apoyaban a otras comisiones delincuentes.
En el receso pasado dimos nuestro parecer sobre la conveniencia de traer cuatro refuerzos excelentes en vez de quince medio pelo, pero se hizo todo mal, se trajeron trece desconocidos o apuestas y dos que vinieron como los salvadores de Huracán, cuando provenían de hacer campañas regulares en All Boys.
El presupuesto del plantel profesional termino siendo de $1.250.000, cuando de los 32 jugadores, 15 son juveniles y de los refuerzos la mayoría eran apuestas. ¿Hiciste las cuentas? Es innegable que se utilizo pésimamente este dinero.
Hoy en día, suena mal, pero institucionalmente lo mejor sería apostar y endeudarse hasta las manos para traer dos refuerzos excelentes, de la talla de Cellay, Montenegro o Bolatti, para buscar alguna salvación de este pozo en que cayó Huracán directo a la B Metropolitana. Lamentablemente, hay que priorizar lo deportivo.
Dejanos tu comentario: